viernes, 17 de febrero de 2012

Cocktails un jueves por la noche

Hoy a mediodía me lo he pasado fenomenal. La cantina de la planta 22 es un sitio bastante peculiar. Ya os dije, me parece, que hay una zona en la que cada día eligen un país y ponen comida típica. Los alemanes han llegado a la conclusión de que el pollo es típico de todos los países (pollo au vin, pollo thai, teriyaki de pollo, pollo napolitano,...). Yo me atrevería a añadir que el arroz y las berenjenas también parecen ser típicos de todos los países, aunque yo ya he renunciado a probar el arroz típico de cada sitio, por miedo a acabar como un globo.

Luego pagas y te vas a la zona de las mesas. Es la experiencia más cercana a un high school americano que voy a tener en mi vida, imagino. Los de los desks nos llevamos entre nosotros, como os podréis imaginar. Hoy iba con mi bandeja y los italianos (uno del desk y otro ya fijo en EEUU) me han ofrecido que me sentara con ellos (en high school, sería super "popu" por esto!). Hemos estado hablando de deportes, sobre todo de fútbol y estaban encantados de que supiera tanto. Con mi padre y Tamara en casa, algo tenía que aprender! Hasta les he contado la anécdota de Davids en Londres (uno de ellos era de la Juve). Al final hemos quedado en que cuando empiece la liga americana vamos a ver un partido, que puede ser bastante gracioso. Insistiré para que vayamos cuando juegue Beckham, al menos. Durante la comida han intentado descifrar qué tipo de perfil de hombre me gusta por tres cosas aleatorias que había dicho a lo largo de la conversación (que si Mourinho me caía genial, o Capello, etc). De la nada, me buscan novio estos italianos.

Esta tarde daban, como cada jueves, Vampire Diaries y luego episodio cruzado de Anatomía de Grey y Private Practice (que al final tampoco ha sido para tanto). Lo hemos visto con una botella de vino de Napa que  ha traido Tamara a casa en plan sorpresa.


Luego, aunque me haya costado la vida, he quedado con María (la italiana) y Stephanie (la francesa) para tomarnos algo. Ellas habían ido a ver "Aida" a la ópera. A mí me apetecía un montón ir, pero se me quitaron las ganas cuando me dijeron que iban a comprar entradas de pie. Tres horas de pie no las aguanto ni loca. Al final, han conseguido las entradas tiradísimas y en un sitio fantástico, sentadas. La idea es que vayamos la semana que viene, dependiendo de la obra que haya.

Arreglarme cuando ya estoy repanchingada en casa un jueves: no estoy acostumbrada. Claro, que también estoy acostumbrada a vivir a 30 km de Madrid (y no tener coche). Qué gusto poder ir andando a todas partes. Stephanie conocía a uno que iba a estar en Lavo. Al ver lo imposible que estaba para entrar, hemos decidido tomarnos algo en TAO mejor. Me he tomado un martini de pomelo que estaba incluso mejor que el cocktail del otro día. Hemos estado hablando y cotilleando un rato. Seguramente hemos acertado yendo a TAO en lugar de Lavo, porque para charlar estaba mucho mejor. Acabo de llegar a casa... pero me alegro de haber hecho el esfuerzo: me lo he pasado genial con ellas y me da la sensación que va a ser con quienes mejor me voy a llevar de los otros desks.


A la piltra YA, que mañana me despierto pronto y tengo una call a las 9.30!

3 comentarios:

  1. Sí!! es el Tao que yo conocía!!! y otra cosa... no vayas a un partido de la MSL, por favor!!! no aguantan sin hacer falta ni tirarla fuera más de 2 minutos! tipo nosotras al padel...
    besos!

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  2. JAjajajaja, es que también os quiero yo ver jugar al pádel!!!

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  3. italianos buscandote novio.... estoy taaaaaaan sorprendidaaaaa
    TIII AAAMO

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